Existen dos formas tradicionales de preparar el matcha: usucha (薄茶, té ligero), y koicha (濃茶, té concentrado).
El usucha es el más conocido y se reconoce por su capa de espuma. En este artículo hablaremos sobre el koicha.
Tanto el usucha como el koicha se preparan en la ceremonia del té.
En el koicha, se utiliza más matcha y menos agua, por lo que la bebida es mucho más concentrada.
Es muy saludable en términos de los nutrientes que contiene, pero hay que tener cuidado porque el contenido de cafeína es el doble del usucha.
Para preparar el koicha se requiere de un matcha de muy buena calidad, o en otras palabras de un grado ceremonial. No se recomienda hacer el koicha con un matcha promedio, porque resulta demasiado amargo y astringente.
Cómo preparar el koicha
Primero se añaden 3.75 gramos de matcha a la taza, que son más o menos 5 cucharaditas del chashaku, la cucharita de bambú tradicional.
Aunque no es obligatorio, se recomienda filtrar el matcha para que no forme grumos. De esta forma será más fácil de batir.
Después vertimos un poco de agua caliente, y luego batimos con el batidor de bambú (chasen) lentamente para formar una especie de pasta.
Es importante agregar agua en pequeñas cantidades para ver cómo va quedando la consistencia, pues la queremos muy densa. En total no deben ser más de 20 ml de agua.
Finalmente seguimos batiendo, pero no tan rápidamente como cuando se prepara el usucha. Es un movimiento lento.
El koicha no forma espuma, así que no hay necesidad de esforzarse mucho.
Preparar el koicha es una buena forma de saber de qué tan buena calidad es un matcha.