Casi siempre se recomienda una cucharita normal para el té, pero hay quienes usan las cucharas medidoras de té.
En mi opinión, no vale la pena usar estas cucharas.
Hay tés que ocupan más volumen que otros
Algunos tipos de té son de hojas grandes o largas. En ese caso, una cucharita normal es más útil porque las hojas de té que sean demasiado grandes no caben en la cuchara medidora.
Normalmente, las hojas que ocupan mucho volumen tienden a pesar menos que si tenemos una cucharadita de hojas más pequeñas.
Esto nos lleva al segundo punto:
Lo importante en el té es el peso, no el volumen
Por ejemplo, una cucharadita de sencha pesa más que una de bancha.
Lo que necesitamos para más exactitud es una balanza que pueda medir gramos.
De nada sirve la cucharita medidora si tenemos tés cuyas hojas no pesan lo mismo.
Como es tedioso tener que pesar las hojas cada vez que vamos a hacer un té, mi sugerencia es que sólo se pesen una vez para hacerse una idea.
De ahí en adelante lo aproximamos con nuestra cucharita normal.
También depende de nuestra preferencia, en caso de que queramos usar más o menos té.
No hay que hacer del té algo tan rígido. Podemos prepararlo como queramos.